Hay lugares donde literalmente uno no debería quedarse dormido, sin embargo cuando el sueño o cansancio lo vence uno, dormir en esos lugares, suele convertirse en esa clase de "sueñito" muy placentero y por demás reparador. Pues para la muestra un botón. En la foto podemos ver, como este caballero cayó en brazos de la famosa deidad onírica en plena zona céntrica de la ciudad de Bogotá (Estación Las Aguas), en donde es fácil ser robado y en donde además, confluye gran cantidad de personas. El pelo también parece reflejar la profundidad del sueño en el que está sumido este personaje. Lo extraño de este detalle, es que hasta ahora no me explicó porque su cabellera se encontraba tan "revolcada" si no hacía nada de viento.
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1 comentario:
hola Sandra...mejor no saber el porqué :) porque la fotografía así tal cual se ve está muy bien!!!
...si no te importa, me gustaría usarla para mi blog, poniendo claro la referencia.
un saludo!!!!
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